Modos Verbales
Gran parte de la gramática que se desarrolla en inglés para enseñar el idioma no tiene un contenido práctico que la respalde.
En español el sistema verbal se divide en tres modos, indicativo, imperativo y subjuntivo.
Vamos a explicarlos de una manera práctica, prescindiendo absolutamente de exactitudes teóricas que no lleven a una comprensión clara.
Podríamos decir que para poder expresar todo lo que necesitamos como seres humanos, tenemos que cubrir tres grandes campos: Indicativo, Imperativo y Subjuntivo.
El indicativo es la dimensión de lo real, de lo que hago, haré, hice o haría. Es decir, es el campo en donde están los tiempos verbales simples: presente, pasado, futuro y condicional.
Este modo en español es muy complejo.
La conjugación varía según los verbos acaben en -ar, -er, o -ir.
Un extranjero que empiece a estudiar español puede tardar meses en entenderlo y dominarlo.
La gramática inglesa recoge el concepto de indicativo y lo desarrolla a nivel teórico. Pero cuando vamos
al contenido, nos encontramos con el siguiente “baile de infinitivos”. No hay conjugación, ni cambios verbales al pasado o al futuro.
Las palabras se suceden una detrás de otra con los verbos en infinitivo, y ya está:
Presente: yo cantar, tu cantar, el cantar, nosotros cantar, vosotros cantar, ellos cantar.
Pasado: yo estudiar-ed, did tu estudiar?, tu didn’t estudiar,…
Futuro: Yo will venir, will tu venir?, tu will not venir.
Condicional: Yo would empezar, tu wouldn’t empezar, would tu empezar?.
El imperativo es el campo de las sugerencias, los consejos, las órdenes. En español sigue en la línea de la complejidad, dado que no hay una uniformidad a la hora de conjugarlo. Dependiendo de verbos y de si es afirmativa o negativa la conjugación puede variar mucho:
¡Estudia!, ¡estudiemos!, ¡que estudien!.
¡No estudies!, ¡no estudiemos, ¡que no estudien!.
En inglés continúa siendo todo del mismo color:
Estudiar!, let’s estudiar!, tener ellos estudiar!.
No estudiar!, let’s not estudiar!, tener ellos not estudiar!.
El subjuntivo, el gran temido, sobre todo por los ingleses que estudian español. Es tan complejo que muchos de ellos no llegan nunca a dominarlo.
Es el reino de las cosas que deseamos. Para simplificar podemos decir que toda forma verbal que tiene sentido después de la palabra “ojalá”, es subjuntivo.
Ojalá vinieras, ojalá lo hubieras hecho, ojalá llueva,…
A los ingleses les resulta tan difícil de aprender porque no tienen nada parecido en su idioma. Siguen sin tener nada más que infinitivos. Es como entrar en un mundo en blanco y negro. Todo es del mismo color.
Yo quiero que cante Pepe (cante: subjuntivo):Yo querer Pepe cantar: I want Pepe to sing.
Así es el inglés, simple y sin complejidades. Y si se sabe enseñar así, tal cual es, también resulta sencillo de aprender.